La cerveza engorda: ¿verdad o mito?

Dicen que lo que no mata, engorda. Y si la cerveza nos da la vida, debe engordar muchísimo ¿no? La idea de que la cerveza engorda es una preocupación bastante habitual, sobre todo ahora que estamos en plena época veraniega y parece que entran en conflicto las dos cosas que más nos apetecen: Llevar ropa bien corta y tomarnos nuestras cervecitas frescas en el chiringuito.

Sin embargo, hoy queremos decirte que la lógica de la sabiduría popular no es absoluta ni infalible y que no tienes por qué preocuparte.

Esta es la verdad sobre si la cerveza engorda.

¿Es verdad que la cerveza engorda?

Técnicamente, todo lo que comes engorda, incluso la más sana de las ensaladas, contiene algunas calorías. Y si estás pensando en hacerte vegano de nivel 5 y no comer nada que arroje sombra, te advertimos de que tragar aire no engorda, pero hincha la tripa bastante.

La nutrición es un tema muy complejo y los alimentos que cada persona debe o no debe comer para alcanzar sus objetivos de peso no entran dentro de nuestra expertise. Si te preocupa tu peso, te recomendamos que hables con un profesional de la nutrición que pueda ayudarte en ese aspecto.

Lo único que podemos decirte, con total seguridad, es que una cerveza de vez en cuando no va a ser lo que eche por tierra tus objetivos.

¿Cuántas calorías tiene una cerveza?

Las calorías que tenga una cerveza dependerán del estilo y de la cantidad. Las cervezas 00 y las cervezas sin alcohol tienen, por norma general, menos calorías que las cervezas tradicionales, pero, al mismo tiempo, hay que tener en cuenta que las cervezas oscuras suelen tener más calorías que las claras. Las cervezas Lager son las que menos calorías por 100ml tienen, seguidas de las cervezas de malta y jengibre, mientras que las cervezas que más engordan son la cerveza negra y la cerveza belga.

De forma aproximada, una caña de cerveza en un bar contiene unas 75 calorías, un tercio son unas 150 calorías y una lata de 33cl en tu casa son aproximadamente 139 calorías.

Sabemos lo que estás pensando: ¡te han engañado! Eso no es casi nada.

La realidad es que la cerveza es una bebida muy poco calórica, que no contiene grasas y que consiste, sobre todo, en agua. Desde luego, es mucho más sana que la mayoría de los refrescos azucarados a los que muchas veces se recurre pensando en evitar la cerveza.

¿Por qué se dice que la cerveza engorda?

La cerveza no engorda demasiado si se consume con moderación, pero hay que tener en cuenta que la mayoría de las calorías de la cerveza, proceden del alcohol y son lo que se conoce como “calorías vacías”. Esto significa que son calorías que no tienen ningún valor nutricional. Es decir, no es lo mismo consumir 139 calorías de fruta (que aporta vitaminas, fibra, minerales, etc) que, de alcohol, que no es nutritivo.

Además, responde a esta pregunta con total honestidad: ¿cuántas veces te tomas tu caña o tu jarra de cerveza en compañía de tus amigos y no la acompañas de algo de picoteo? Una croqueta, un pincho de tortilla, unas patatas fritas o unas olivas siempre caen. Reconócelo, la cerveza sola parece que se queda corta.

En resumidas cuentas, si eres una persona que lleva una vida medianamente activa y saludable, no tienes por qué renunciar a tu cervecita por las tardes con tus colegas y mucho menos en verano. Mientras hagas un consumo responsable, olvídate de contar las calorías. Además, cuando disfrutamos bien de la comida y la bebida, las calorías pesan mucho menos.